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No puedo cambiar (prefiero desaparecer)
Palabras distribuídas sin ningún tipo de orden especial, o espacial, o sí.

14.7.13

Can u find me space inside your bleeding heart?

Se me clava alguna parte de tu tórax entre las costillas. Es algo de la textura de tu pelo que está impregnado en las raíces de toda persona que conozco. Me dolés en cada hueso. No quiero que me golpees más. Y sé que siempre te digo lo mismo, pero estoy cansada de que me destroces a mordiscones. Me duele. Jugué con cada milímetros de tus uñas, y bastó? Tengo huesos pequeños incrustándose entre mis entrañas pero no te digo nada. Sé que me ves consumirme a casa segundo, a cada ceniza, a cada trago más. Pero vos tampoco decís nada. Respirame ciento-tres tardes de niebla. El silencio nos abraza y nos sostiene un poco más fuerte. Hoy me dice: no te caigas. Tu autodestrucción me llena de ganas de destruirte. Me quiero tragar tus dedos, vomitártelos en el desayuno y decirte que no quiero que me toques más. La última vez que te dije esto me dijiste que no me podías escuchar, que la música estaba muy alta. Nuestra iglesia nos destruye de nuevo. El templo te pide que vuelvas a casa, y cedés. Te podés caer de mil formas sin tocar el suelo. Te pueden matar de mil formas distintas sin que dejes de respirar. Necesité aprender un par de cosas antes de entender que vos eras inmortal. Tu alma está tan muerta que me sorprende que aún tengas aliento para decirme que te gustan mis ojos porque son muy grandes. Conversaciones de divague y otros cuentos que poca gente recuerda. Que pocas veces recuerdo. Que seguro ni te acordás de que pasó. Como siempre, el pasado me aplasta y me pide que vuelva. Y es la fragilidad de esta realidad lo único que me hace quedarme. Construir castillos sobre lo que a fin de cuentas, sí importa. En otro orden de las cosas, de eso se trató siempre existir.

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